Mórbida Mujer

Sobre las cobijas se nombran subversivos poéticos a tu piel…

Las coplas se embadurnan de recuerdos póstumos.

Íngrimo de la desidia tu faz… se reconoce la muerte…

No puedo mirar lo ridículo de la creación

Y río al intentar darte un soplo de vida…

Te miro aun absorto, porque ya no estás entre ánimas,

Ni eres tú mi natural consorte…

Tus labios amoratados se duermen...

El silencio rechina en tus huesos laxos…

Acaricio tu pecho, tu cintura, tu brazo caído en la esquina…

Beso tu boca, tus senos impenetrables, tu vacilación…

Intuyo a la lengua lugares por donde perdió sangre…

Beso tu vientre pútrido, por donde nacerá el Sepulcro…

Restablezco de la nada en las ruinas…

Me pierdo en los laberintos de tu risa…

Imprudentemente recorro tu pubis,

Retrato en mi mente el desenfreno…

Regreso a tus viles rostros disfrazados,

Y tus ojos angélicos me miran…

Sólo me queda cerrarlos en homenaje a su telón…

Lloro luego de tenerte para siempre mía,

Pues no pude contener el deseo…

No pude detener el tren que fragua la existencia,

Rompiendo los ramos de exquisita expiración,

Enamorando inefablemente a tu muerte…

Un mar de ideas afloran corrupto a los designios de mi locura…

Me permití perder en la noche ida tu corazón…

Pero dejo mi simiente en tu inerte cuerpo…

Algún día mi heredera de amores,

Cuando incinerada del sol te pierdas,

Que de tu vientre renacerá la descomposición…

Y de ella, mortales de miasma…

Una rosa banal de invierno crecerá…

Una rosa que lamentará ser de muerta…

Así algún día mi amada de mil adioses…

Volverás a la tierra envuelta en belleza…

Con amor a tu final… ¡Adiós!



David Acosta.

Decirte algo.

Al principio, subrayaba letras en la hoja del periódico; en un artículo grande quedaron subrayadas cosas como: tú me gustas. Te mandé la hoja sin esperar respuesta, pero tú me contestaste recortando palabras de una revista: también. La próxima vez, a parte de subrayar algunas palabras, imprimí otras sacadas del Internet y pegué en los bordes de la hoja del periódico. Me costó escribir mis propias palabras y cuando abrí la boca, fue solo para murmurar un “te quiero”.

Gabriela Cabezas

Safari

SUBIR Y BAJAR

De poco a poco se está haciendo tarde afuera. Las sombras se abren paso por la urbe. Los espectros empiezan a salir de su escondite. Todo se vuelve tan distante. Todo se vuelve tan irreal. El frío no tiene compasión con las visiones que deambulan en la noche.

Allí va ella. Lo único que se oye es su caminar en medio del callejón. Allí va ella huyendo de los malditos recuerdos. Corre, corre. Escapa de sí misma con una lágrima adornando su rostro. El miedo acecha. La mentira se convierte en realidad. Va ella sin un rumbo, va ella sin tener a donde llegar.

“Ven aquí. Yo tengo la respuesta. Solo toma mi mano y vas a ver que encontrarás una salida. Acércate un poco más... Solo un poco más... Esta es la poción que necesitas. Solo déjate llevar… Solo déjate llevar…”

Se deja caer en el húmedo suelo. Las siluetas lentamente van despareciendo. El cielo se tiñe de rojo. Y se eleva. Siente que se eleva en la oscuridad. Se abre paso a través del tiempo. Acaba de olvidar su nombre. No recuerda tampoco quién es. Solo sabe que va más alto. Más alto. Pronto va a tocar el cielo. Las mariposas vuelan alrededor de su cabeza. Los duendecillos le regalan una sonrisa pasajera. Está flotando. Flota, flota, flota. ¡Qué pequeñas se ven las cosas des de arriba!. Sus problemas están ocultos bajo el mismo puente en el que se dejó abatir. Los enemigos lucen como hormigas cuando uno se encuentra al borde del limbo. ¡Sí, sí!… jamás había sentido algo como eso. Flotaba, flotaba, desde lo alto de un rascacielos. Le sonríe a la luna, que es la única cómplice de su desaparición. Y ahora toca el descenso. Cada vez más bajo. Se acerca aún más al suelo. Ve la cima tan lejana. Las estrellas retoman su color. El rojo del cielo se convierte en escarlata. Ahí va. Ahí va. Cae con fuerza. Sus gritos no son audibles. Cayó. Dolió mucho… dolió mucho…

El crepúsculo le cede la gloria al anochecer. Las estrellas no brillan esta noche. Las luces de los faros desfilan como pequeñas hadas en medio del silencio. Nuevamente lucen las apariciones. Otra vez los edificios se convierten solamente en vacios bloques de negrura.

Allí va ella. No está corriendo. Solo escucha su respiración a medida que se acerca al final de esa calle. Tranquila, va tranquila. Pronto llegará. De eso está segura. No se debe perder la convicción. Contiene su llanto. Sus lágrimas se ahogan dentro de sí. Esta a punto de caer en manos de la desesperación.

“Ven aquí. Yo tengo la respuesta. Solo toma mi mano y vas a ver que encontrarás una salida. Acércate un poco más... Solo un poco más... Esta es la poción que necesitas. Solo déjate llevar… Solo déjate llevar…”

Toma asiento sobre el frio asfalto. Los miedos de poco a poco se esfuman como el humo con el viento. Las personas la miran. Pero eso no importa. Ya casi son como pequeños puntos oscilantes en medio de la infinidad del espacio. Allí va ella. Cada vez más alto. Asciende y asciende. Con intención de llegar a la meta. Alrededor suyo solo pasan los rostros que alguna vez le hicieron daño. Sus heridas están cicatrizando. Sube, sube. Está a punto de llegar. La cima brilla aún más que su sol muerto. !Oh si, oh sí!. ¡Qué bien se siente volar!. Qué bien se siente estar encima de todo. El viento avasalla sobre su cuerpo. Una sola sonrisa aparece tímida en su rostro. Grita. Grita aún más fuerte. Se escucha todo al hacer eco. Y ahora no teme. No le teme a la caída libre. Ahí va ella nuevamente. No es más que un cuerpo cayendo desde el borde. Arriba solo ve la frontera. Ya no es tan malo. Vale la pena. Solo mira las lágrimas brotar de su rostro y escalar como lo hizo hace un momento. Se acerca el final. Ahí abajo descansa su cuerpo. Solo cierra los ojos y se prepara para la colisión. Cayó. Ya casi no duele… ya casi no duele.

El astro de la media noche le ha quitado su sitio a la brillantez. Las calles se tornan criptas oscuras. Los palacios encantados sacan a relucir un fantasma. La maldición acecha la ciudad. La lluvia azota a sus desafortunados.

Una silueta aparece otra vez en el callejón. Ahí va ella, como un cuerpo sin vida. Con una sonrisa falsa en el rostro. Camina con sus ojos radiantes de ansiedad. Acompañada solamente del leve dolor que acecha en los brazos. Allí va ella sin temor a que alguien la esté buscando. Sabe a lo que va. Tiene un rumbo. Tiene un sitio al que nadie jamás podrá entrar.

“Ven aquí. Yo tengo la respuesta. Solo toma mi mano y vas a ver que encontrarás una salida. Acércate un poco más... Solo un poco más... Esta es la poción que necesitas. Solo déjate llevar… Solo déjate llevar…”

Casi un cadáver yace solo en la oscuridad. Esta es la batalla final. No hay miedo. Ya no existe temor hacia su misma sombra. Solo quiere huir al tope de la eternidad. Nuevamente se despega del suelo. Sube, sube, sube. Casi olvidaba lo bien que se siente ir por aquella escalera a la cima del mundo. No importa nada. No importa nada cuando ya se ha bebido la pócima. Las lágrimas terminaron la noche anterior. Solo una vez más. Por favor. Solo quiere sentir una vez más lo que es tomar velocidad a través del cielo. Más arriba. Ya está cerca. La punta de la montaña luce nublada en esta ocasión, pero así es mejor. Sí, así mejor. Ahí va ella. Tan liviana. Más hermosa que nunca. Apenas le quedan fuerzas para reír entre esa pulcra sensación. La brisa envuelve su ser reglándole los besos que nunca le fueron otorgados. Los espíritus le toman entre sus brazos dándole el cariño que nunca logró. Sí. Es fantástico. Es suficiente encontrarse en lo alto. No quiere más que contemplar la nada desde la rama de un desconocido árbol. Ha pasado la puerta. Solo basta un segundo. Un segundo de su corto tiempo para convertirse en una verdadera princesa. Ahí va ella. Siente el vacío dentro de sí. Suspendida en el aire cede el paso al descenso. Caer. Empieza a caer. No lo siente. Ya nada se siente después de aquella experiencia. Más rápido. Su cuerpo procede aún con más fuerza. Intenta aferrarse a las alturas pero ya es demasiado tarde. Ha desfallecido más allá de la tierra. Ha sobrepasado su misma imagen. Ya no hay nadie que pueda librarle. Cayó. Ya no duele… no duele nada. Su ser sigue y sigue, camina hacia el fin de la eternidad.

Erika Rosado.

Karen Freire

Ángulo de Esencia: Una visión absorbe innatismo y desarrollo, escenas transferentes en actos circundando, porcentajes de realidad fluyendo con oníricas flying, estados magnánimos alejados de represión; sensible perplejidad…
Capacidad y Propiedades interactúan, lluvias circunscribiéndose, venus connaturales en artístico enlace. Enganchando notas en estados admisibles, adjunto en esta percepción cenital.

Espectro-difusión


Alterando placidez
impresiones obnulentes,
suscitante como arúspice
en depresiones truculentas
escuetos reprimidos,
albergante ascético,
proliferaban sensación
a suntuosos,
tónicos tactos.

Caprichosas infusiones
difuminantes en cordura
bordando enigma
de trastocada agitación,
acentúan;
tétricas cortezas
que rasgan diacronía.

Sintonizando ondas
de infame sortilegio,
asimétricas,
fatigadas láminas
vaticinantes de augurios,
lúgubres alegatos
inhalan figuras
en emético desenlace.

PUENTE

Por: Kenny Oñate

Tae-wa recorrió parsimonioso el puente colgante que conduce desde el jardín de los cerezos hacia la otra orilla del río. Del otro lado estaba Ming-yi, cuya belleza era capaza de extasiar el grito del cisne. Se encontraba ataviada en un vestido tradicional de seda decorado con flores de Loto. Su mirada se concentraba en la danza de la luna sobre el río. Tae-wa se sentó junto a ella en la estrechez del puente.

-¿Cómo es que tu piel es tan blanca, Ming-yi?
-Mira el tigre –Replicó ella.
-¿Cómo es que tu piel es tan blanca, Ming-yi?
-Mira el dragón –Respondió esta vez.
-¿Cómo es que tu piel es tan blanca, Ming-yi?
-Mira el saltamontes –Pronunció tranquila.
-¿Cómo es que tu piel es tan blanca, Ming-yi?
-Mira la ciudad prohibida –Le dijo
-Me pides que mire todas esas cosas, pues no las veo. Solo veo la blanca brillantez de la luna reflejada sobre el agua y sobre tu rostro.
-Pues no has visto nada –Sentenció Ming-yi

Carlos Ruiz Zafón




CARLOS RUIZ ZAFÓN

Podría decir que Carlos Ruiz Zafón es mi escritor favorito.

Nació en Barcelona en el año de 1964. Pasó su infancia y juventud en el Colegio de los Jesuitas San Ignacio de Sarriá. Supo que quería ser un escritor desde los cinco años y a partir de entonces tuvo el afán de inventar historias. Estoy muy de acuerdo en la más importante enseñanza que me ha dado a conocer: “El escritor se forma tan solo por su experiencia, es un trabajo de constancia y disciplina al que piens

o solo son aptos los que se morirían haciendo otra cosa”.

Este autor logró conquistarme con su novela El Palacio de la Medianoche, la cual forma parte de su trilogía con El Príncipe de la Niebla su primer libro publicado en 1993 (mi año de nacimiento ;) y Las Luces de Septiembre, que no lo he leído por que no lo venden aquí en Ecuador. Estos tres libros mencionados, fueron divulgados principalmente para un público joven. El autor ha mencionado repetidas veces que antes de escribirlos pensó en los libros que le hubiesen gustado leer cuando tenía trece años, pero son recomendables también para un publico mayor.

Posteriormente, pasé a leer Marina, una novela juvenil publicada en 1999 y de la cual ya se han lanzado diez ediciones. El libro trata sobre dos adolescentes que atraviesan los dieciséis años, juntos se aventuran a descubrir un enigma enterrado por años. Lo recomiendo para los jóvenes que disfrutan del romance y las historias conmovedoras. A mi modo de ver, es un libro realmente hermoso destinado a quienes se atreven a ver más allá de lo que se esconde tras la apariencia de una persona.

En el 2001 Carlos Ruiz Zafón saca a la luz su libro de mayor éxito: La Sombra del Viento, que hasta ahora ocupa el primer lugar en mi lista de los mejores libros. Con gran fuerza narrativa el autor nos sumerge en una historia relatada en la mitad del XX, internándonos en medio de una tragedia romántica y dejando que el lector se pierda por entre una Barcelona oscura y gótica de la que nos da a conocer. Las historia comienza cuando Daniel Sempere despierta una mañana de 1945 y es llevado por su padre al Cementerio de Libros Olvidados, en donde encuentra un libro que lo enredará entre las inconfundibles cadenas de misterio, que se ocultan el corazón de la ciudad, y se verá marcado su destino para siempre. El estilo que Ruiz Zafón ocupa en esta, su obra más ambiciosa, mantiene a los lectores en el suspenso y a intriga hasta en la ultima de sus letras. Es uno de aquellos textos por los cuales se podría dejar de dormir, por tan solo pasar a descubrir los sucesos que nos expone la siguiente página. Insuperable, realmente.

Para quienes hayan leído el anterior libro que he mencionado, recomiendo que lean también El Juego del Ángel. Una historia independiente a la Sombra del Viento, pero que está conectada con sus mismos personajes, este bello libro nos introduce en los eventos anteriores a la saga de Daniel Sempere. En donde se borra con maestría la línea que separa lo existente de la ficción.

Por ahora, este autor reside en Los Ángeles, en donde escribe guiones de cine además de su carrera de novelista, aún con la esperanza de volver a su Barcelona natal. Ha mencionado repetidas veces que piensa en un futuro escribir una novela ambientada en esta ciudad americana que con gusto la esperaremos su seguidores.

Bibliografía.

www.carlosruizzafon.com

También se sacó esto de los libros que ha publicado.


Erika Rosado

Dieggo.

¿Qué quién soy? Me he preguntado eso por mucho tiempo, tal vez por eso me rompí la cabeza ideando una entrada ingeniosa o un juego de palabras para mí presentación. ¿Qué tonto verdad? Pero bueno, ni modo.

Quise empezar contando un chiste o alguna anécdota graciosa; como cuando niño: me comí un sapo confundiéndolo con un aguacate. Pero eso no fue gracioso; es más, fue desagradable y es mentira.

Mí nombre es dieggo, soy un "ningún" o quizá un "ni más ni menos". El hecho es que no me considero trascendental. Creo que todos son importantes para algo, pero yo no; estoy libre de esa presión.

Sí, soy escritor; pero por que la vida me obligó, mi parco talento se asemeja a una semilla que cayó donde no debía. No me mal entiendan, amo escribir, por eso anhelo de manera insana vivir en la nube de la que nunca debí caer.

Pero ya está, “muerto por mil, muerto por diez mil”. Vivo para escribir y mis letras buscan dar voz a quienes no la tienen. Por eso me convertí en periodista; labor que poco conjuga con ser escritor. Aunque ya egresé, no me arrepiento.

Acerca de lo que leo; pues no leo de todo. Alguien me dijo alguna vez “la vida es muy corta para leer basura”, desde ese día, nunca más le di alguno de mis cuentos a esa persona. Sí, lo acepto, escribo basura; pero es mí basura, al puro estilo de Cervantes, "mis hijos feos".

Me gusta escribir, dibujar, bailar, tocar guitarra, leer, pensar, estar solo, hacer el amor y todo eso lo hago mal, excepto lo de hacer el amor. Me gustan los perros, pero no los de raza. Creo que son tácitos y pomposos. Es decir, aburridos.Me gustan los perros callejeros, aquellos que siempre andan en jaurías salvajes. Donde puedes encontrar al perro cojo, al que tiene un oreja mordisqueada, al grandote y al de la cola chistosa. Son simples, tal cual como les tocó vivir, así soy "yop" y no espero agradar a nadie, aunque siempre termino haciéndolo.



Es más, soy mal hablado, borracho y bohemio, no fumo por que ya me jodí un pulmón, no miento, por que soy malo para mentir; creo que soy normal, o bueno casi. Lo que quiero es ser el último decapitado, el rey de los batracios; busco reabrir el Rincón de los Justos, navegar por el Guayas y toparme al Guasinton, robarle la novia a Ivanhoe, hacerme el ciego, creerme un escribidor, volar con el guaraguau, y no dejarme matar a puntapiés por algún loco del perfume.

No, no sé quien soy; pero voy a escribir de algún personaje que si sepa.

-.-.-.-

Tu vida parece una novela; donde quieres hacer el papel de niña buena… Ya estoy cansado que me hagas daño y no pueda detenerte, una mirada tuya vasta para que no pueda reponerme…
(Una salsa de no sé quién)

Las sombras conjugan perfectamente con las luces de color verde y amarillo. El humo de los tabacos deja entrever el vaho del aliento de cuerpos sin rostro que símiles a maniquíes encuentran refugio en alguna pared o esquina del "Rincón de los Batracios". Pronto; el hombre de la música, encandila el lugar con algún himno de bohemia, lujuria, traición o cualquier emoción vulgar. Los inertes cuerpos dejan las fumarolas, sueltan los vasos y buscan al otro sexo para descargar gritos de emociones en movimientos latino-simétricos.

Yo, al igual que todos me desprendo de una esquina, y camino por la pequeña pista esperando encontrar pareja. Y de pronto; delante de mí se encuentra la mujer que la noche me brinda. Una trigueña atrapada entre telas y modismo de sensualidad. Le mostré mí mano y ella no dudó en aceptar, ya dispuestos sin más discursos ni etiquetas, hice gala de `costeño´.

Mis brazos atraparon la insinuante cintura de la morena; su cuerpo indomable pedía a gritos un par de giros y con un moviendo extraño de brazos hice que pierda el sentido. Pero esta vez atrapé su cuello y lo predispuse para que su rostro muestre esos entre dibujados labios. Ella extasiada por la música, parecía entregar el alma en un beso, lastima, solo era parte de un hábil movimiento de baile.

Ya, profundamente erotizado por sus feromonas impregnadas en el aíre, estaba dispuesto a preguntarle por su vida, pero el señor de la música, decidió que ya era tiempo que los cuerpos vuelvan al anonimato. Cortó súbitamente el flujo de vida, de salsa y los cuerpos se volvieron nada, llenando nuevamente el pequeño universo de humo y cerveza y destrozando mí anhelo de tener una vida normal.

Un caso parasicológico en la Literatura Policíaca

En cuanto a Literatura Policíaca; libros que considero muy buenos, son “La Absoluta Perfección del Crimen” del Francés Tanguy Viel, quien sigue una línea muy moderna y francesa de este género; enfatizando fuertemente el componente sicológico de los personajes.


Los Franceses tienen por decirlo así; toda una escuela de Literatura Policíaca. Incluso, se publican novelas policíacas en formato de Novela Gráfica.
Están también los libros de la inglesa Antonia Fraser, con su conocida detective femenina Jemima Shore, quien investiga el asesinato de Chloe Fontaine en un edificio de departamentos de Londres, otrora una edificación victoriana en “Una Mancha Roja” o el asesinato de varias monjas en un convento católico en “La Monja Sin rostro”, siguiendo una línea muy clásica y muy inglesa de este tipo de Literatura.



Están también los libros del estadounidense Lawrence Block. Enmarcados en un movimiento muy contemporáneo que a través de la resolución del crimen, critica a la sociedad neoyorquina; en la que se ambientan sus obras, como “El ladrón en el Armario” o “El ladrón que no quería robar”, consideradas también dentro de lo que se conoce como Novela Negra.

Muy buenas obras para iniciarse en la lectura de este género considero que son las siguientes novelas cortas: “Asesinato en el Orient Express” de Agatha Christhie, “El Misterio del cuarto Amarillo” de Gaston Leroux y finalmente el cuento largo de Edgar Allan Poe “El misterio de Marie Roget”, de este último es del que les voy a hablar en este post y del que les pongo el Link para que se lo descarguen:

http://rapidshare.com/files/32691016/Poe__Edgar_Allan__Misterio_de_Marie_Roget__El.pdf

En el verano de 1841 se encontró muerta en el río Hudson a Mary Rogers, una vendedora de cigarros neoyorquina muy admirada por su belleza. Edgar Allan Poe quien vivía en la pobreza y con escaso reconocimiento literario; encontró en este caso una oportunidad para escribir una narración policíaca en la que el investigador Dupin (quien ya había aparecido antes en “Los Crímenes de la Calle Morgue”) resolviera un nuevo caso. Lo que hizo Poe fue escribir un paratexto utilizando los reportes de la Policía de Nueva York y las crónicas que los diarios neoyorquinos habían publicado al respecto.



En su relato, Poe crea una ficción en la que se encuentra muerta a Marie Roget, esposa de un perfumista en las orillas del Río Sena. El cuento de Poe se publicó entre el otoño de 1842 y el invierno de 1843 con personajes, escenarios y situaciones paralelas a las del verdadero caso. Para ese entonces, los tribunales de Nueva York todavía no pronunciaban una sentencia respecto al caso, pero el relato de Poe ya señalaba a un culpable. La sociedad neoyorquina, conocedora de que Poe tenía acceso a la información del Departamento de Policía de Nueva York y muy consternada por el hecho de que no se hallara al asesino de Mary Rogers, empezó a especular sobre la posibilidad de que Poe la haya asesinado para poder escribir su relato, dada su necesidad de dinero y su fascinación por la muerte. Hasta hoy no hay evidencia de que Poe haya intervenido en el crimen.




Más tarde durante el año de 1845, nuevos testimonios y la confesión del asesino, esclarecieron el asunto, librando a Poe de toda sospecha y dejando ver que el personaje paralelo de Poe al que Dupin atribuyó el asesinato en la historia ficticia, correspondía al verdadero asesino; convirtiendo a éste, en todo un caso de Parasicología dentro de la Literatura Policial.
Bibliografía:
Prefacio al cuento "El misterio de Marie Roget", en Obras Selectas de Edgar Allan Poe de ediciones EdiMat
Kenny Oñate

Un panorama de la literatura policial.

Un universo urbano. Sucedió un crimen. Existe un detective. Todo un enigma aguarda por ser descubierto. ¿En qué consiste este laberinto de intrigas y personajes?.



El género Policial, del cual posteriormente existieron subgéneros como son la Novela Negra, El Thriller y, en parte, la Novela de terror, se basa en mostrar la naturaleza humana de una manera mucho más cruda a comparación de otros géneros. Expone de un modo oscuro y grotesco la realidad que se vive en las diferentes sociedades, internando a su lector en lo más profundo de sus problemas sociales como son la violencia y el crimen. Estos, siempre van acompañados de un toque de suspenso y misterio característicos de su clase.

La estructura de este género consiste, principalmente, en su protagonista: El detective. Que ha ido evolucionando a lo largo de la historia. Desde un personaje elegante, hasta un policía ocioso que se encuentra atrapado en la inmundicia de su entorno. El primer personaje será el encargado de resolver el enigma (un asesinato, una desaparición, etc.), por medio de pistas que dan la pauta al lector para predecir cuál será el desenlace sin perder, en absoluto, su atmósfera de suspenso.

El escritor que se encargue de un relato policial, deberá aferrarse a la única regla del género: La resolución de un crimen por medio de la lógica y argumentos que llenen en absoluto la causa y el por qué del efecto.

Existen aún contradicciones entre los seguidores de la narrativa policial, en la que unos indican que no es más que un modo de entretenimiento para sus lectores; mientras que otros aseguran que el genero es un modo de revelación de la sociedad, en la cual se expresa el descontento general de un pueblo, camuflado de novela. Por ahora, hay que dejar que cada quién que se interne en el mundo policiaco decida sobre a cuál hipótesis desea apegarse.

ORIGEN Y EVOLUCIÓN
Se podría decir que el género tiene una fecha de aparición con Los Crímenes de la Calle Morgue del escritor estadounidense Edgar Allan Poe, publicado en 1841. En donde se encuentran bien enmarcadas las características del género detectivesco. Posteriormente pasaron a divulgar El misterio de Marie Roget (1842), La carta Robada (1844) y El escarabajo de Oro (1843). Los dos primeros de estos últimos mencionados a más de la novela que dio origen al género fueron protagonizados por el primer detective de ficción Auguste Dupin, que pasaría a ser el ejemplo de otros relacionados con el género como son el detective Sherlock Holmes de sir Arthur Conan Doyle y Hércules Poirot, famoso personaje creado por Agatha Christie. El género fue llevado a su madurez en la llamada escuela inglesa de novela policiaca que se basaría en un estricto control de la trama, casi matemático, formado por pistas y piezas que encajen perfectamente con los sucesos, internándose en la parte sicológica de sus personajes casi todos pertenecientes a la clase alta. Por el contrario, en América, el género no fue muy bien aceptado de este modo; se dejó en segundo plano la resolución del enigma y se provechó el género para resaltar los aspectos sociales del crimen y los problemas en una sociedad corrupta, abriendo caminos por medio de la clase social baja y mostrando lo miserable de los ambientes en la que la novela se desarrolla. Esto último fue conocido como Novela Negra.

Durante la década de 1920 surgió en Estados Unidos un nuevo modo de representar al género, difundiéndolo a través de revistas de la época: El Thriller. De este modo se logó derribar las barreras que existían entre el género policial y los distintos a su clase, como los relatos espías y aventura. De este modo, se destacaron los autores estadounidenses Dashiell Hammett, creador de Nick Charles; y Raymond Chandler que nos trajo uno de los más importantes detectives del siglo XX como lo fue Philip Marlowe.

A partir del año 1950, la imagen que tenía el lector del detective cambió violentamente. Se olvidó en absoluto al personaje que solía ser visto como un héroe a uno más real, una persona de carne y hueso que cumple simplemente con su labor.



Por otro lado, el género policial fue muy bien acogido en Europa. Principalmente países como Inglaterra y Francia, este último en donde se tradujeron las obras de Poe y dieron la pauta para la procreación de novelas similares y detectives misteriosos. Para cuando se formó la corriente inglesa encabezada por Conan Doyle, Francia ya tenía su primer detective de ficción, el inspector Lecoq, ingeniosa creación de Émile Gaboriau. La más famosa novela dentro de Francia pasaría a estar en manos del escritor Gaston Leroux con El misterio del Cuarto Amarillo, en la cuál empezando desde su título es evidente la técnica y características de las cuales la novela policial requiere, su protagonista, el detective Joseph Rouletabille, tuvo gran acogida entre los lectores. Cabe mencionar también a Georges Simenon, escritor Francés de origen Belga, de quien nace el célebre personaje del comisario Maigret, cuyo método consiste más introducirse en el amplio campo sicológico de sus personajes.

Bibliografía:

www.aalidoneos.com
www.correctores.iespana.es
www.negraycriminal.blogcidiario.com
www.bgsu.edu.com

Erika Rosado.

Primer Concurso de Microrelato NienPintura 2009


El Grupo Literario NiEnPintura Convoca al primer Concurso de Microrelato Nienpintura 2009 con las siguientes bases:

1. Podrá participar cualquier persona sin límite de edad con un texto que no haya sido publicado o premiado antes. (Los participantes que obtengan premios deberán poder asistir a la premiación en Quito y venir a recibir el premio).

2. La temática es libre.

3. Se considerarán premiables microrelatos de una a quince líneas de extensión.

4. Cada participante podrá enviar cuantos trabajos desee someter al concurso.

5. La convocatoria estará abierta desde hoy día 06 de septiembre de 2009 hasta el día 15 de Octubre de 2009.

6. El trabajo deberá ser enviado a nienpntr@gmail.com, en un archivo adjunto de Microsoft Word, firmado con el seudónimo con el que deseas que se publique.

7. El jurado calificador estará integrado por las seis personas que publicamos en este blog. El fallo se dará a conocer hasta el día 31 de Octubre de 2009.

8. Se declararán tres primeros lugares y se otorgarán menciones de honor de considerarlo necesario. Las personas que reciban premios y menciones serán contactadas por email a la dirección desde la que enviaron el trabajo para fijar la fecha de la premiación.

9. Los premios para los ganadores consisten de la publicación del trabajo en nuestro blog, un lote de libros y un café que les vamos a invitar por la premiación.

Se estarán preguntando:
¿Por qué debo participar? Para compartir tu talento con los otros. Y porque si eres el único que manda si trabajo, de ley ganas.
¿Por qué debo ir a Quito a retirar el premio? Queremos estimular a que personas de todo el país participen, pero el blog es nuevo y no tenemos presupuesto para pagar gastos de envío si ganas el concurso pero vives fuera de Quito.


Cualquier pregunta que tengan sobre el concurso, déjenla como comentario en esta entrada.

Gabby Cabezas

Mi nombre es Gabriela Cabezas, y a pesar de tener el nombre que más se repite en Ecuador, me gusta que me digan Gabby y me gusta escribirlo así. Tengo diecinueve años y me gradué antes del colegio (porque entré antes), solo que decidí irme un año de intercambio.



Siempre estoy con un libro, es con eso o escribiendo en una libretita. En general, en la libretita escribo casi siempre, no significa que no esté atendiendo, porque sí atiendo a lo que la gente me dice. Además, lo que escribo son simples pensamientos sobre lo que pasa en el momento.


Hay algo que no entiendo, ¿por qué si la gente dice que le gusta escribir o dibujar, no lo hace constantemente?

Me parece una contradicción y, tal vez por eso, yo no soy así. Me encanta escribir y por eso me la paso escribiendo; me encanta leer y me la paso leyendo.




Y aunque casi siempre estoy con un libro, considero que aún me falta demasiado por leer. Si alguien me quiere recomendar algo, ¡gracias!. Me gusta de todo, pero lo que más me gusta es todo lo que tenga que ver con Haruki Murakami, la ciencia ficción, la fantasía, Mishima, Kawabata, Ruiz Zafón y tengo que mencionar a Harry Potter aquí, porque me fascina, porque fue por esos libros que comencé a escribir.

Estudio comunicación en la católica y tengo un blog personal bastante malo :S
En fin, esa soy yo.






Cosas que Caminan
Gabby Cabezas
Salí a la calle dispuesta a todo. No a todo, pero no quería pensar en eso. Tuve que volver el momento en el que llegue a la puerta; subí corriendo las gradas y con mucha desesperación, llegué a ver los escritos que un amigo me había dado, una libretita con mis pequeños versos y un cuaderno con mi diario.
-Escritos tuyos, libretita, cuaderno. Listo, están bajo el escritorio. En el tarro supuestamente para la ropa sucia.
Cuando hablo en voz alta me siento más segura de las cosas. No vaya a ser que a mis cosas les crezcan patas que las lleven de un lugar a otro y negar la posibilidad de encontrar mi habitación vaciada.
Salí y a las dos cuadras de caminar me encontré un cuaderno botado en un basurero, seguro que a ese un fantasma se lo llevó y ahora su dueño anda preocupado buscándolo por todo lado.

Kenny Oñate


“De amor yo no sé nada lo mío es la Astronomía” Dice Koxmoz en la canción “Mi Confesión” de Gotan Project y lo mío es lo cósmico, lo sideral, lo astral, y lo galáctico. Escucho Rock Sicodélico de Júpiter Maca y Psychotrance de Infected Mushroom. Me la paso viendo cine Arte y Cine independiente porque detesto la basura Hollywood, pero las películas que más disfruto son las sicodélicas como "Wood y Stock". Me llaman mucho la atención las cosas como el amor, la magia y la amistad, tan puras, irracionales y verdaderas que son capaces de trascender a través del universo y eternizarnos a través de ellas. Quiero ser El Último Profeta de la Galaxia.

La Literatura es un romance para toda la vida. Hay personas que descubren que les gusta leer a los 17, 24, o 30 años, en mi caso fue a los cinco y desde entonces nunca más me alejé de los libros. Las palabras por sí solas son hermosas y poderosas, pero qué tal un día empezar a jugar con ellas; ponerlas juntas como pieza de rompecabezas para armar algo que junto se oiga bien y darte cuenta de que al armar ese rompecabezas, solo armaste una pieza que se puede juntar a otras. Escribir para mí, es emprender este juego de armar rompecabezas que juntos conformen historias; una mirada, una palabra, una sensación, una ráfaga de luz, una frase que viene a tu cabeza: juntas pueden ser una historia increíble.


Hay libros que lo dejan a uno con el cuerpo pegadizo y el alma intranquila como por quince días, esos son libros que uno nunca olvida, como “El Señor Presidente” de Miguel Ángel Asturias, las Obras Completas de Palacio o “El Guardián entre el Centeno” de Salinger, pregunten sino cuántos asesinos en serie llevaban en su mochila un ejemplar de éste al momento de cometer los crímenes. Hay libros que te arrancan lágrimas con su ternura, es el caso de José Mauro de Vasconcelos en “Rosinha, mi canoa”, “El Palacio Japonés” o “El Velero de Cristal”. Los leí cuando tenía entre once y trece años, así que supongo que son los responsables de que yo sea así; tierno, nostálgico. Hay libros a los que siempre quieres volver como “Zoom” de Gabriela Alemán, "El Principito" de A. de St. Exupéry o “La Divina Comedia” de Dante y hay libros como “Tejiendo con hilo Color Damasco” de Marusa Silva que simplemente hacen que te preguntes ¿porqué no escribir yo también?

Hago teatro como desde los 14 años. El teatro es una increíble fuerza sanadora, además de muy lúdico y sorprendente; he estado en algunos montajes escénicos y cada uno es totalmente nuevo y diferente al anterior. La sensación de estar en las tablas con toda esa adrenalina recorriendo tu cuerpo, con cada poro sirviendo de instrumento para expresar no tiene igual. El Teatro es sinergia, concentración, atención, diversión, voz, movimiento, honestidad; nada de actuación, no hay para mí nada más humano, honesto y auténtico.





Acabo de graduarme del cole y el mundo es para mí una cosa incomprensible, repleta de sorpresas y de bruscos cambios de un segundo al siguiente; peor para mí que siempre estoy pensando en otra cosa, a cada rato distraído escapando de que me atropelle un carro. En la medida en la que lo comprendo puedo decir que el mundo es esclavo; del dinero, del tiempo, de los intereses; el mundo está enfermo, con guerras, política y religión. Y todo esto debido a la gran deshumanización que atraviesa la sociedad. Sin embargo siempre he hallado refugio en ella y siempre ha estado ahí para mí, el Arte, que nos vuelve niños y nos hace humanos, que nos fraterniza al plantearnos realidades diferentes, que nos conmueve hasta hacernos llorar. Por eso escribo, porque me hace más honesto, más humano.


Este Octubre voy a ingresar a la escuela de Medicina porque las ciencias, siempre y cuando estén al servicio de los seres humanos y no de intereses; nos permiten contribuir a sanar este mundo. Como médico quiero ayudar en comunidades de mi país y viajar al África con Médicos sin Fronteras. Quiero escribir teatro y literatura juvenil, quiero a través de mi arte, ayudar a conmover y a sanar.
Diagnosis
Kenny Oñate
“Impétigo” repitió el médico. “Es una infección bacteriana generalizada de la piel que se contrae con agua. Te estoy prescribiendo ungüento tópico y antibiótico oral para cuatro semanas, en quince días ya te verás curado” Mi madre sostuvo su cabeza en sus manos, agachándose afligida en la silla colocada ante la entrada del consultorio mientras sollozaba temerosa de que esa insignificancia sea indicativo de que sobre mi, haya acaecido la desgracia de heredar un sistema inmunológico deprimido como el suyo. Mi padre sentado en la silla frente al escritorio del médico, convencido de que todas mis enfermedades eran sicosomáticas, no dijo nada; estaba ocupado pensando cuánto le costaría surtir la prescripción y cuánto de eso le devolvería la aseguradora. Yo, todavía sentado en la camilla de enfermo sin camiseta; fui feliz como no lo había sido en semanas. Nada me alegró más que la idea de que mi piel no solo fuera asidero de mis penas, lágrimas, desencantos, tristezas, desdenes, distancias, silencios, sollozos, desilusiones; sino que también pudiera alojar un poco de vida por insignificante que esta fuese.
Tal era mi felicidad que habría pospuesto el inicio del tratamiento una semana, de no ser porque si lo hacía, no podría volver a la piscina.

David Acosta


Los cuentos del diablo devoto


(Ese soy yo)

Permítanme presentarme, mi nombre es David Acosta… El horizonte de la razón para que muerte permanezca en las laderas, pues teme ser retratada por mi pluma… La razón para que haya una letra en las esquinas, el preso que no caya su llanto seco…

Mi edad perdura a la inestabilidad del lapso, no cumplo años, pero tengo 22. Las memorias no son las mismas, pero se detienen en esta edad…. 8 de noviembre la fecha exacta en que nació mi ser, denigrado de los infiernos a mortal…

Estudio psicología, de filosofía, literatura y política, me encargo de las ambigüedades, coloreándolas con arte y oscuridad… Mi pasión es el entendimiento de las masas y mis escritos guardan pergaminos viejos de soledad…

Mi música es precisa para destruir anatemas como la moda y debajo de la guitarra los acordes de mi voz. Mi música rompe todas las reglas, para demostrarnos que en la penumbra, nos crecen alas de cuervo y libertad…

Supongo que somos los únicos que nos comemos vivos, la carroña que existe en el mundo entero… los géneros literarios basura, la música sin sentido, la moral de fanatismo, la verdad a medias. Somos los verdaderos templarios de la amistad.

Así, yo no soy nadie en un mundo compuesto por hipócritas, pero represento a un pequeño mundo de verso y verdad…


Mujer narcótica
Por David Acosta

Así fue, te encontré hermosa y nublada, en una tarde invierno, cuando el amor decidió aparecer.

Al verte mi corazón latió al máximo y te sentí como una extraña ánima que perforó mi piel entrando en mi sangre, de manera rauda y volátil.

Así, la sangre se conjugó contigo, y me recorriste el cuerpo estremeciéndolo todo, elevándome los sentidos, explotándolos. Así, mis oídos podían escuchar cosas que inclusive no eran de este mundo… Cantos de perdición y santería.

Mis pupilas, también se abrieron al horizonte, y me permitieron admirar el espectro del universo; formas insospechadas. Un unicornio cabalgado por la más bella dama y un jinete cantando salmos a la noche.

De repente, en ese apoteósico escenario, el telón de párpados se cerró de golpe… No se que me tumbó al piso, pero preferí creer que fue la fuerza de tu mirada. La caída al pavimento de por sí, fue más suave que caer en lana.

Ya en el suelo, miraba como de mis costados, trigales perforaban mi piel con su olor a incendio, y aves carroñeras llegaron de la fas de la nada… Supe entonces que debía despedirme, pero cuando quise besarte, no pude; ya habías huido…

Erika Rosado

Si bien es cierto, uno deja de ser quién es al momento en que se entrega al abstracto mundo de los mitos. Jamás podré liberarme de los versos que me atan. Se ha vuelto parte de mi, así como la infinidad de voces y personas que nacieron desde la tinta punzante. Apenas me queda tiempo para reflexionar acerca de los hechos antes de grabarlos sobre un viejo pergamino. La línea que divide la magia de lo real, se ha vuelto simplemente un horizonte inalcanzable para formar la ilusión más bella, esa de la cuál solo me queda refugiarme en lo más profundo de un libro abierto. Estoy aquí después de todo, con la única convicción viva que me queda: No temo caer desde el borde.




"Cementerio"

Erika Rosado

No es difícil conseguir un sitio aquí dentro. Es tan sencillo como comprar una entrada para el teatro y un poco más complicado que encontrar asiento en el autobús.

En el instante en que sientes que la presencia de la dama se acerca, el procedimiento es sencillo. Solo hay que dejarse llevar, permitir que el arroyo que conecta estos dos mundos nos guíe por el sendero correcto. Se debe correr por el túnel antes de que una bofetada te despierte, se debe seguir y saltar hacia la luz como si fueras a aterrizar sobre una inmensa nube de algodón. Al despertar, vas a encontrarte con un vasto mundo de confusión, donde el tiempo y el espacio no existen, donde no tenemos noción de lo real. Vas a tropezar con nosotros y estaremos encantados de recibirte.

No se debe temer a la caída libre. Al estar al borde, solo queda aventurarse hacia el fin de los tiempos. La única regla es perder el miedo a recorrer el mundo solo. No aceptamos a los llorones que gimen a la hora de su entierro. Tampoco nos agradan los que tienen su tumba llena de flores. Serás bienvenido si te gusta la noche. Admitimos solo a aquellos que saben guardar silencio a la hora de visitas. Es fácil llegar aquí, es fácil ser acogido. Solo debes estar muerto, no pedimos nada más. Muerto. No muerto de miedo. Muerto de verdad.

Antes de ponerse cómodo se debe esperar a que el sepulturero cubra con tierra las últimas rosas; también debes aprender de memoria la historia de cómo es que llegaste hacia aquí, por que en este sitio no existe la tinta para escribirlo... y cuando todos se hayan ido, cuando las lágrimas se hayan marchado de alrededor de tu nicho, saldremos a darte la bienvenida. Vas a abrir los ojos entre claveras sonrientes y te invitaremos a sentarte con nosotros, bailaremos al son de los huesos y asustaremos al conserje. Verás que los muertos la pasamos muy bien, todos juntos en la noche, ya sin preocupaciones ya sin motivos por los que aferrarse a la rutina. Los muertos sabemos como divertirnos.

Ven aquí. Somos tus compañeros ahora. Acércate un poco más para que conozcas al primer inquilino. El viejo Billy nos cuenta historias de cuando vivía. ¡No vas a creer cuantos de nosotros habitamos en este sitio!. Encontrarás chicas bonitas y ancianos gruñones, mujeres alegres y a varios ladrones. Algunos nuevos y otros más antiguos, pero eso no importa, aquí somos todos iguales, somos difuntos, fallecimos un día que casi olvidamos y ahora estamos unidos en el cementerio. Si, este es el Cementerio un lugar que nadie imagina. Este es el Cementerio, donde está también tu suegra de la que creíste te habías librado. Y ahora acabas de llegar. Ven a nuestra fiesta.

No querrás acercarte a la parte de atrás, allí las criptas son oscuras y dentro vive una familia de comandantes que aun piensan están en la guerra. Y si te aproximas mucho a la salida te asustarás de los fantasmas que rondan allí afuera. Debes quedarte con nosotros en el centro. Aquí reímos entre cadáveres y zombis, entre sombras y colores. Nos embriagaremos con el agua que nos dejan en las flores y vamos a jugar al escondite tras los sarcófagos. Si quisiste siempre ser roquero vas a sorprenderte de cómo tu cabello crece y si no, pues ya no hay más remedio. No podemos perder tiempo, hay que apresurarse a la diversión, por que el amanecer se acerca y es entonces cuando deberás volver a tu podrido cuerpo, allí dormirás cómodo a la espera de otra jornada de negrura, también podrás ir al terminal a ver si alguno de los tuyos se ha decidido por entrar al club.

Ven y disfruta con nosotros, somos los muertos y no hay nada mejor que ser un simple recuerdo.

¿Qué es NienPintura?


Un grupo literario, casi nuevo, del Ecuador.